Ceci Otello Lambrusco
Paradigma de la interpretación moderna de Lambrusco, ágil pero al mismo tiempo complejo, es un agradable rojo brillante, de un intenso color púrpura con vivos reflejos violetas. La nariz expresa notas alegres de fresa, mora y frambuesa con toques de ciclamen, menta, regaliz, sotobosque, canela. Una complejidad inusual para un Lambrusco, que se confirma en la suavidad envolvente del sorbo, espeso y cremoso, afrutado y persistente. Perfecto para la cocina parmesana en su máxima expresión, ofrece combinaciones inesperadas con muchos platos italianos e internacionales. Si va muy bien con carnes curadas como el jamón de Parma o el salami Felino, por otro lado, equilibra perfectamente una pasta de huevo hervida o rellena.
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